La expulsión de coágulos durante el periodo es normal y no reviste gravedad. Pero cuando hay otros síntomas, como puede ser dolor, conviene consultar a un especialista.
A pesar de que la presencia de los coágulos de sangre es algo normal durante las menstruaciones en gran parte de las mujeres, es también un aspecto que debemos vigilar para ver si se asocia a otro tipo de síntomas.
Nunca está de más consultar este tema con nuestro ginecólogo. No obstante, tal y como nos señalan los expertos, cada cuerpo es único y cada mujer vivirá su periodo de un modo u otro, y la presencia de coágulos no es algo que deba alarmarnos obligatoriamente.
Te damos todos los datos a continuación.
¿Qué son los coágulos de sangre que aparecen durante la menstruación?
Para entender mejor qué son esos coágulos que vemos de vez en cuando a lo largo de nuestro periodo menstrual, hemos de tener en cuenta algunos aspectos:
- Las paredes de nuestro útero suelen cambiar gradualmente para preparar el organismo de cara a un posible embarazo. Se vuelven más gruesas, se llenan de nuevos tejidos con los que, en caso de darse la concepción, poder albergar al feto.
- Por norma general, cuando sufrimos una herida la sangre tiende a coagularse. Es un tipo de defensa mediante el cual evitamos perder sangre en exceso. No obstante, durante la menstruación se necesita que la sangre fluya de forma ligera para ser ser expulsada.En caso de no existir embarazo, esta capa formada en el revestimiento uterino se desprende poco a poco, formándose así la propia menstruación.
- De ahí que el útero genere un anticoagulante. Si nuestra menstruación es muy abundante, ese “coagulante natural” se acaba y, por lo tanto, suele aparecer algún que otro coágulo.
- Normalmente estos coágulos suelen oscilar entre los 5 mm y los 4 cm, y suelen ser más frecuentes en las mujeres que presentan un periodo más abundante. Aquellas cuyas reglas son algo más livianas no suelen experimentarlos.
- Otro dato a tener en cuenta es que los coágulos suelen ser más habituales mientras dormimos. La sangre se coagula y suelen formarse estas masas más espesas y llamativas que en ocasiones nos asustan.
Aspectos a tener en cuenta sobre la formación de coágulos durante la menstruación
1. El déficit de hierro
El déficit de hierro en la mujer supone en ocasiones un verdadero quebradero de cabeza.
- Es común que una regla abundante nos haga perder los niveles de este mineral, pero a su vez, se sabe que cuanto menos hierro en nuestro organismo, mayores problemas tiene el útero para generar el “anticoagulante natural” de ahí, que la anemia ferropénica genere a su vez más coágulos de sangre.
- Por ello, no dudes en hacerte análisis de forma periódica para controlar los niveles de hierro y cubrirlos en caso de déficit con algún suplemento que te recomiende tu médico.
2. Pequeños desequilibrios hormonales
Es común que tanto las adolescentes como las mujeres que acaban de dar a luz presenten flujos con coágulos de sangre.
Todo ello se debe a pequeños desequilibrios entre los estrógenos y la progesterona, algo que también podría ocurrir un poco antes de la menopausia.
3. Un aborto involuntario
Este es un aspecto que debemos tener en cuenta. Si tenemos como objetivo quedarnos embarazadas y notamos que en un momento dado aparece un coágulo de sangre de color amarillento o grisáceo, lamentablemente, podría tratarse de un aborto involuntario.
No dudes nunca en consultarlo con tu médico o ginecólogo.
4. La endometriosis
La endometriosis es esa enfermedad silenciosa que sufren millones de mujeres. Algo que debemos tener en cuenta es que, en caso de que la menstruación sea excesivamente dolorosa e incapacitante, cabe la posibilidad de que suframos esta dolencia.
- La endometriosis afecta a los órganos reproductores femeninos, y se caracteriza por la formación de un revestimiento muy denso alrededor del útero y otros órganos. Todo ello cursa con dolor, y es común que durante la menstruación veamos abundantes coágulos de sangre.
5. Enfermedades ginecológicas
Tal y como hemos señalado al inicio, la presencia de coágulos de sangre es común en muchas mujeres. No obstante, en caso de que nuestras menstruaciones sean dolorosas es necesario consultar siempre el tema con nuestros ginecólogos.
- La enfermedad inflamatoria pélvica, por ejemplo, suele cursar con un profundo dolor abdominal en la zona de la pelvis que se relaciona también con la presencia de coágulos de sangre en la menstruación.
- Este tipo de enfermedad, originada por un tipo de bacterias, genera una infección desde el cuello uterino hasta el útero, las trompas de Falopio o los ovarios.
- Es dolorosa y es una de las dolencias ginecológicas más comunes, por ello es importante que ante cualquier duda o molestia, consultemos a los profesionales.
Se sabe además, que la presencia de miomas o quistes también se relaciona con los coágulos durante la menstruación. Así pues, a pesar de que estos coágulos sean algo normal, nunca está de más en que acudamos a nuestras revisiones anuales.
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